NOVENA DE FERIA

Ferrera/ Tejela/ Bolívar
Toros de Cortés

Ovación al sobrero de Fernando Peña


Texto y fotos. J.M.S.V.


Oreja para Tejela

Día del Santo Isidro. Rosquillas de las tontas y de las listas en los tendidos. La merienda del 4 espectacular. Había hambre de tarde de toros buena, pero… Me encontré junto a la plaza con mi amigo Luis Miguel Encabo y me recordó que hace unos años escribí para él un texto en el Anuario Taurino de la Prensa. No me sorprendió que me diera las gracias porque es un torero de corazón, pero si me desconcertó porque en este ambiente, como dice César Palacios, nadie conoce a nadie, sobre todo los que creen que son alguien (he dicho los que creen).
¡Qué lastima de toro! Eso decía un tipo que tenía pinta de no tener ni idea, pero que resultó ser un sabio del Sanedrín. Cierren los ojos y hagan cuenta de que están escuchando la radio en plena rueda informativa: ¡Sobrero de Fernando Peña, pinchazo y estocada caída. Oreja! Seguramente, escrito sea con todo el respeto, pensarían que es el resumen de lo sucedido en una plaza de segunda. Pues no… ocurrió en Madrid, con Tejela y en el cuarto de la tarde.
A eso de las ocho y cuarto, cuando Servicillo fue devuelto, la banda de la plaza comenzó a tocar Los Nardos y al son de la música se escucharon palmas de tango. Faltaba solo la pandereta. No se si fue esto o aquello (es decir, lo que comentaba ayer Israel Cuchillo), pero lo cierto es que veinte minutos después Tejela daba la vuelta al ruedo con una oreja en la mano. Lo hizo bien, correcto, digamos que incluso más que bien, pero lo remato mal, digamos que incluso más que mal. Y venía yo pensando por el camino. ¡Y a mi que mas me da!
Cambio de tercio. Ferrera resultó cogido por Divisor, el primero de la tarde, cuando lo toreaba de muleta, pero tuvo el pundonor de permanecer en el ruedo hasta despacharlo. No entiendo por qué cuando un torero tiene ese gesto se le recrimina porque la espada ha caído baja. Llevaba un cornalón que se veía de tendido a tendido y si eso no se respeta… ya no respetamos nada.
Bolívar llegó mermado y se notó. Cumplió como pudo, le pegó una buena tanda al quinto, que metía la cabeza con avaricia, y luego fue a menos. Al salir de la plaza fue ovacionado.
Ah… No hagan caso de lo que acaban de leer, seguramente es mentira, pero me gusta inventarme las cosas. Y mañana Dios o el demonio (que también era un ángel y a veces se nos olvida), nos dirán.


Isidros y Manolas en la plaza



Calentando el caballo


El sonido de las mulillas


Bolivar liándose


Un castoreño con la brújula al noroeste


Apuros de Dionisio Grilo


Ferrera jugando con el toro


Derechazo de Ferrera


La cornada de Ferrera

Ferrera herido
Pase de pecho de Tejela


El de la puerta


Quite de Domingo Navarro en banderillas
Cambiado de Bolívar


Tejela con la izquierda


Liromplero entregado a la muleta

Comentarios

  1. Es verdad que el público de Madrid no deja de sorprender:¡Es tan variable! Unas veces cruel, otras extremadamente generoso.En sus juicios influyen factores tan diferentes como el humor que tenga ese dia, si hace buen o mal tiempo o cualquier otro argumento ajeno a la lidia como pueda ser la inmediatez de un partido de futbol o si el torero en cuestión sale o deja de salir en determinados programas televisivos. Unas veces está triste,otras alegre,en ocasiones deja y otras más impide.A mi juicio constituye todo un tipo esquizoide,un gran monstruo de incontables cabezas y bastante infantil, por cierto.(Como ejemplo solo hay que fijarse en como estalla a carcajadas cuando el toro que sale de chiqueros pega un pequeño salto confundiendo la raya que marca el ruedo con un obstáculo).Sí. Esa ingenua inteligencia de masa es la misma que posteriormente enjuicia sobre terrenos, distancias, mide comportamientos y afirma,con un grado de conocimiento innegable si atendemos a la seguridad y rotundidad de sus criterios.(Mayor verdad será cuanto más grite)
    Manejar su voluntad por tanto no siempre depende de las artes del toreo.
    Bastante azar y riesgo hay ya en todo esto como para encima tener que bregar con ser tan subjetivo.¿No creen?

    En fin, es lo que hay.

    SSM

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