Padilla alegró la tarde y el usía le negó la oreja del cuarto
5 Toros de Samuel Flores y 1 (el 1º) de Manuela Agustina López Flores
Padilla: silencio y saludo
Encabo: silencio y silencio
Iván García: silencio y aplausos
Con los samueles tampoco. El primero fue de Manuela Agustina López Flores y debió irse a los corrales por flojo. Los matadores banderillearon en los tres primeros, cediéndose los palos, pero en esta suerte estuvieron mejor los subalternos en la segunda parte de la corrida, entre ellos Miguel Ángel Sierra, de la cuadrilla de Encabo, que clavó entre los pitones del quinto. El respetable se aburría y protestaba hasta que Padilla alegró la tarde después de un par al violín y de un emotivo brindis a los que estábamos en el ruedo.
Hizo Padilla lo mejor de la tarde, que no bueno, y aunque la estocada cayó baja la mayoría pidió la oreja. No la concedió el presidente y la bronca fue monumental. Me gustó la dignidad con que salió a saludar el toro, negándose a dar la vuelta al ruedo.
Encabo estuvo desconfiado e Íván García, cuando se dio cuenta de que tenía el mejor toro ya sonaba el aviso. Era el sexto y se acababa la corrida. Le aplaudieron. Ayer martes de carnaval y hoy miércoles de ceniza.
Rezando el Padrenuestro
El Gran Poder
De salón para la Virgen
Padilla
Iván García
5 Toros de Samuel Flores y 1 (el 1º) de Manuela Agustina López Flores
Padilla: silencio y saludo
Encabo: silencio y silencio
Iván García: silencio y aplausos
Largacambiada de Padilla al cuarto
Con los samueles tampoco. El primero fue de Manuela Agustina López Flores y debió irse a los corrales por flojo. Los matadores banderillearon en los tres primeros, cediéndose los palos, pero en esta suerte estuvieron mejor los subalternos en la segunda parte de la corrida, entre ellos Miguel Ángel Sierra, de la cuadrilla de Encabo, que clavó entre los pitones del quinto. El respetable se aburría y protestaba hasta que Padilla alegró la tarde después de un par al violín y de un emotivo brindis a los que estábamos en el ruedo.
Hizo Padilla lo mejor de la tarde, que no bueno, y aunque la estocada cayó baja la mayoría pidió la oreja. No la concedió el presidente y la bronca fue monumental. Me gustó la dignidad con que salió a saludar el toro, negándose a dar la vuelta al ruedo.
Encabo estuvo desconfiado e Íván García, cuando se dio cuenta de que tenía el mejor toro ya sonaba el aviso. Era el sexto y se acababa la corrida. Le aplaudieron. Ayer martes de carnaval y hoy miércoles de ceniza.
La cuadrilla de Encabo
Rezando el Padrenuestro
El Gran Poder
De salón para la Virgen
Padilla
Iván García
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