Primer festejo de la Feria Taurina de Begoña (9 de agosto)

La feria de Begoña de 2012 en Gijón llega tarde a Larga Cambiada por dificultades “técnicas” (que es como mejor queda) y que finalmente hemos podido ir resolviendo. Nuestras disculpas para quienes esperaran oportunamente los detalles fotográficos que año tras año venimos ofreciendo. Para la historia, aunque con retraso, aquí tienen los siete festejos que desde el 9 al 15 de agosto se han celebrado en la hermosa plaza de El Bibio de Gijón.

Hace falta algo más

Novillada de La Guadamilla
Luis Miguel Castrillón: saludos y silencio
Tomás Campos: silencio y silencio
David Martín Escudero: silencio y silencio
Algo más de un tercio de entrada

Fotos y texto: Manuel Durán

De nuevo en Gijón, con una feria más que interesante en los carteles. Carlos Zúñiga, con doce años de empresario en El Bibio, ha completado un serial que a priori, así al menos nos lo parece, puede servir para que la afición asturiana pueda sentirse orgullosa de esta semana taurina.

Para empezar, una novillada perfecta para triunfar, auque después cada novillo tuviera sus cosas. El más favorecido en los lotes, Castrillón, aunque demasiado frío toda la tarde, apenas conectó con el público. Curiosa su disposición ambidiestra ya que a su primer novillo lo intentó matar con la izquierda con un pinchazo y a continuación cobró una buena estocada con la derecha.

Si llegó al público con sus largas cambiadas a porta gayola Tomás Campos, pero pocos muletazos limpios después. En su haber, las ganas y el talante de eso que los aficionados llaman “estar en novillero”.

David Martín Escudero, apenas pudo demostrar nada en su primero, novillos parado y sin transmisión y en el sexto, cuando quiso centrarse, la tarde ya había caído en el aburrimiento total.

El detalle de la novillada fue la terna de apoderados: José Antonio Campuzano con Castrillón, Rivera Ordóñez con Campos y Victorino Martín a su sobrino David, con apellidos ilustres ganaderos: Martín y Escudero. Pero para triunfar hace falta al más. Se dice aquello de que hay que estar en novillero. Es un tópico, pero lo cierto es que no se debe olvidar.