San Fermín / 10 de julio

Cuarto encierro: Jandilla (4,28 minutos)
Por David Rodríguez


Foto Efe

Una mañana triste: Muerte de un corredor.

El colorao de Jandilla, de nombre Capuchino, se adueñó de la calle.

Ha sido un encierro vistoso, mucho mejor para el público y los corredores porque tiene más espectáculo. Al disgregarse la manada es ideal porque te deja meterte entre los pitones de los toros, y hoy lo he conseguido.

Con el quinto he ido muy bien, corriendo a gusto hasta que se ha caído. Después se ha levantado y enseguida los mozos le han rodeado, lo que no me ha permitido seguir con él.

Me he quedado en Telefónica con el colorao, el más peligroso de la manada y he ayudado todo lo que he podido para llevar el toro a la plaza. Ha sido largo porque se volvía todo el tiempo, y aunque los pastores han hecho lo posible por conducirlo, iba al bulto. Por eso han habido tantas cogidas. Cuando se vuelven los toros hay que saber reaccionar, hay que saber estar en el recorrido.

He corrido bien y he disfrutado, pero me siento afectado por la muerte del joven, que lamento profundamente.