Texto y fotos: Manuel Durán
Miguel Cancela
Hace poco más de dos horas, terminando este primero de octubre de 2010, recibí un mensaje de mi amigo de Colmenar Viejo, Manuel Jaén, comunicándome el fallecimiento de un amigo, de un torero y de una persona especial: Miguel Cancela Rivas. Otro matador de toros de Colmenar Viejo. Miguel, director de la Escuela Taurina de su pueblo era todo y mucho más para los aficionados y sus alumnos. Su alternativa en Vistalegre en el año 1973 se la dio Gregorio Tébar El Inclusero, con un toro del Conde de Ruiseñada. Lo conocí hace bastantes años. Amigos comunes que ya no están, Paulino Perdiguero, Manuel Revelles me lo presentaron. Lo vi torear en la plaza de tientas de Cerro Longo y enseñar a los alumnos en el ruedo de la laza de Colmenar viejo. La maestría y la naturalidad por delante. Como su amabilidad y su disposición para hablar, para llevar adelante cualquier tema que tocaras y si era sobre las "promesas de Colmenar", mejor aún. Su sobrino Carlos continúa sus pasos y es el alma de esa escuela que da sus frutos. Pedro Lázaro fue uno de los importantes primeros logros... después están viniendo otros. Seguro que terminarán haciendo escuela por si solos. Me guardo esos momentos que compartimos, breves, pero intensos. En la plaza de la Corredera, en El Aljarafe, en Cerro Longo o en El Pósito. Miguel, donde estés tienes mi agradecimiento por haberte conocido y haberme dejado conocerte.
Su alternativa, el 13 de noviembre de 1973
En un pase de pecho
Con su sobrino Carlos Cancela
Miguel Cancela
Hace poco más de dos horas, terminando este primero de octubre de 2010, recibí un mensaje de mi amigo de Colmenar Viejo, Manuel Jaén, comunicándome el fallecimiento de un amigo, de un torero y de una persona especial: Miguel Cancela Rivas. Otro matador de toros de Colmenar Viejo. Miguel, director de la Escuela Taurina de su pueblo era todo y mucho más para los aficionados y sus alumnos. Su alternativa en Vistalegre en el año 1973 se la dio Gregorio Tébar El Inclusero, con un toro del Conde de Ruiseñada. Lo conocí hace bastantes años. Amigos comunes que ya no están, Paulino Perdiguero, Manuel Revelles me lo presentaron. Lo vi torear en la plaza de tientas de Cerro Longo y enseñar a los alumnos en el ruedo de la laza de Colmenar viejo. La maestría y la naturalidad por delante. Como su amabilidad y su disposición para hablar, para llevar adelante cualquier tema que tocaras y si era sobre las "promesas de Colmenar", mejor aún. Su sobrino Carlos continúa sus pasos y es el alma de esa escuela que da sus frutos. Pedro Lázaro fue uno de los importantes primeros logros... después están viniendo otros. Seguro que terminarán haciendo escuela por si solos. Me guardo esos momentos que compartimos, breves, pero intensos. En la plaza de la Corredera, en El Aljarafe, en Cerro Longo o en El Pósito. Miguel, donde estés tienes mi agradecimiento por haberte conocido y haberme dejado conocerte.
Su alternativa, el 13 de noviembre de 1973
En un pase de pecho
Con su sobrino Carlos Cancela
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