Desde
que en el año 776 a. C. en el Peloponeso occidental de la Grecia olímpica se
construyera el primer “stádion” y con la aparición del deporte del juego del
balompié “football” en 1848 se adoptan estos edificios para la práctica de este
espectáculo. En la actualidad con la popularización del fútbol no hay lugar
donde no se ubique un campo de fútbol o estadio para su práctica. En el caso
del Estadio Santiago Bernabéu está ubicado en el Paseo de la Castellana
madrileño y fue diseñado por los arquitectos Manuel Muñoz Monasterio y Luis
Alemany Soler y el 27 de octubre de 1944 se colocó la primera piedra. La
inauguración se realizó tres años más tarde el día 14 de diciembre de 1947 en
un partido entre el Real Madrid Club de Fútbol y Os Belenenses de Portugal,
bajo el nombre de Estadio Real Madrid Club de Fútbol que era conocido por los
aficionados como el Nuevo Estadio Chamartín o “Chamartín”. El Estadio ha
sufrido diferentes remodelaciones a través de su historia. La primera se realizó
en 1954 y el 19 de junio de ese año se inauguró la ampliación del lateral. El 4 de enero de 1955, se decidió que el
estadio adoptara el actual nombre en honor al presidente del club y artífice
del estadio: Santiago Bernabéu. El 18 de mayo de 1957, el Real Madrid inauguró
la iluminación eléctrica en un partido ante el Sport Club do Recife brasileño.
Para adecuarlo a nuevos tiempos los arquitectos Luis y Rafael Alemany y Manuel
Salinas realizaron durante 16 meses la reconstrucción del recinto. La junta directiva de Ramón Mendoza encargó
un nuevo proyecto de remodelación arquitectónico al Estudio Lamela. Las obras
comenzaron el 7 -2 -1992 y concluyeron el 7 -5- 1994. Con la llegada de Florentino Pérez a la
presidencia del Real Madrid, se puso en marcha el llamado “Plan Director del
Estadio Santiago Bernabéu” durante cinco años (2001-2006), encargándose del
proyecto el Estudio Lamela y en verano de 2011, se acometen las obras de
ampliación del graderío del Primer Anfiteatro. Queda pendiente una nueva renovación
total.
Hay
que remontase a los orígenes de la Humanidad para observar que la presencia del
toro ha acompañado el devenir de los pueblos de las riberas del Mediterráneo y
de las tierras del Próximo Oriente. La civilización occidental, heredera de
valiosas tradiciones y modos de vida, es depositaria de conocimientos y de
sabiduría a través de los cuales el hombre moderno puede desvelar los cimientos
de su propia Historia e interpretar muchas de las costumbres de sus
contemporáneos. Las prácticas
lúdico-cinegéticas fueron adoptando diversas modalidades desde sus orígenes,
conformando el sustrato y el fundamento de las celebraciones de hoy. Ahora
bien, aunque las practicas o ejercicios del lanceo de toros se llevaban a cabo
a campo abierto y dichos actos están relacionados con los espectáculos romanos,
realizados en coliseos que son los que actualmente se toman cómo modelo para el
desarrollo de la lidia. Eso no es óbice de que en España en un principio eran
las Plazas de las ciudades (cuadradas) donde se ofrecían las corridas de los
toros. Madrid desecha su Plaza ubicada en la Avenida de Aragón por quedarse
pequeña y comienza la construcción de otra “Monumental” en Las Ventas del
Espíritu Santo encomendada al arquitecto José Espelius que proyecta un Coso de
estilo Neomudéjar en 1919 con ladrillo visto sobre una estructura metálica. La
decoración se realiza con azulejo cerámico, obras del ceramista Alfonso Romero
Mesa, en el que figuran los escudos de todas las provincias españolas y otros
motivos ornamentales, que no pudo finalizar por fallecer retomando la dirección
de las obras Manuel Muñoz Monasterio hasta su finalización en 1931
inaugurándose el 17 de junio con un cartel compuesto por Fortuna, Marcial
Lalanda, Nicanor Villalta, Fausto Barajas, Fuentes Bejarano, Vicente Barrera,
Armillita Chico y Manolo Bienvenida. La Plaza que aún no estaba totalmente
finalizada dejo de dar toros hasta 1933 y su inauguración definitiva se efectuó
el 21 de octubre de 1934, con la participación de Juan Belmonte, Marcial
Lalanda y Joaquín Rodríguez Ortega (Cagancho).
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